Yolimar Alfonso Garavito fue enviada a la cárcel por orden de un juez de control de garantías, tras una solicitud de la Fiscalía General de la Nación. La mujer es señalada de coordinar actividades extorsivas en nombre de las disidencias de las FARC, particularmente en contra de comerciantes y ganaderos de Casanare.
El operativo de captura fue realizado en Tame, Arauca, por unidades del Gaula de la Policía Nacional, con apoyo de la Fuerza Aeroespacial Colombiana. Según la investigación, Yolimar Alfonso sería la encargada de garantizar la seguridad de cabecillas del grupo armado ilegal, además de participar en la planeación de cobros extorsivos en la región.
La Fiscalía le imputó los delitos de concierto para delinquir y tentativa de extorsión, pero la procesada no aceptó los cargos. Aun así, el juez consideró que existían elementos suficientes para dictar medida de aseguramiento en establecimiento carcelario.
Este caso se suma a los esfuerzos de las autoridades por contener el accionar de estructuras residuales de las FARC que buscan mantener economías criminales como la extorsión en zonas estratégicas del oriente del país.